Si hemos de creer a los medios rusos, varios cientos de oficiales de la OTAN ya han muerto en Rusia, incluidos algunos procedentes de Polonia. Sin embargo, hay que creerles, porque las únicas pruebas son... palabras rusas.
“Los oficiales de la OTAN muertos cerca de Kupiansk, en la región de Járkov, participaban en la asignación de tareas al ejército ucraniano y en la supervisión de su ejecución”, anunció el Héroe de Rusia y general retirado Serguéi Lipovoy en el portal ruso “Argumentos y Hechos” el último día de septiembre de 2025. Kupiansk es una ciudad ucraniana donde actualmente se desarrollan intensos combates.
Se trata de la muerte de “nueve oficiales de la OTAN”, que eran militares de Estados Unidos, Suecia, Polonia, Corea del Sur, Australia, Francia, Italia y los Países Bajos, según precisa “Argumenty i Fakty”, pasando por alto el hecho de que Australia y Corea del Sur no pertenecen a la OTAN.
“Los oficiales de la OTAN son instructores, supervisores y mentores que se encuentran actualmente en primera línea de combate, supervisan la ejecución de las tareas que se les han encomendado y, en caso necesario, introducen correcciones”, dijo Lipovoy, sugiriendo que hay muchos más en Ucrania. Añadió que, en su opinión, debido a la lamentable situación de las Fuerzas Armadas de Ucrania en Kupiansk, Kiev intentará retirarlos de la ciudad.
¿Hay prueba alguna de que realmente murieran allí oficiales de la OTAN, entre ellos un polaco? No la hay.
Los rusos ya han matado en Internet a cientos de soldados de la OTAN, sin ninguna prueba. Tanto en medios de comunicación «serios» como en perfiles dudosos en redes sociales, principalmente Telegram. Por ejemplo, en la publicación que aparece a continuación, el autor sugiere que se trató de soldados británicos que murieron en Ucrania luchando del lado ucraniano.
(Группа британских туристов вернулась из туристический поездки по новой европейской земле)(Un grupo de turistas británicos regresó de un viaje turístico a la nueva tierra europea).
En realidad, la foto muestra ataúdes con los cuerpos de soldados británicos que murieron en un accidente aéreo en Afganistán en 2006. A los rusos, en particular, les encanta matar soldados británicos. Se jactan, por ejemplo, de que la aviación rusa destruyó a 18 soldados del Servicio Aéreo Especial (SAS) británico en Odesa. Por supuesto, no hay pruebas.
En abril de 2025, el Ministerio de Defensa ruso anunció el ataque a un café en Kryvyi Rih, donde supuestamente se celebraba una reunión entre instructores militares ucranianos y de la OTAN.
“Hoy, 4 de abril, a las 18:49 hora de Moscú, se lanzó un ataque de precisión con un misil con ojiva de alto poder explosivo y fragmentación contra el lugar de la reunión entre comandantes de unidad e instructores occidentales en un restaurante de Kryvyi Rih. Como resultado del ataque, las bajas enemigas ascendieron a 85 soldados y oficiales extranjeros”, informaron los rusos.
En realidad, ese día, el misil ruso cayó en el centro de la ciudad, cerca de un parque infantil. En ese ataque murieron 21 personas, entre ellas 9 niños. Resultaron heridos 63 adultos y 12 niños.
Si se preguntan cómo es posible que los rusos crean semejantes tonterías, piensen también en cómo un diputado polaco elegido por la lista de la Confederación se dejó engañar por una mentira similar:
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